La personalidad es el conjunto de características y rasgos que configuran la forma de pensar y actuar de una persona. La personalidad es un constructo que se va formando a lo largo del desarrollo, y a pesar de que la mayor parte de la misma termina de formarse tras la adolescencia, ésta sigue siendo susceptible de modificaciones a lo largo de nuestra vida. Es decir, que la personalidad es moldeable y, aunque a medida que crecemos esta flexibilidad vaya reduciéndose, siempre puede modificarse. Ya sea por sucesos inesperados y abruptos que cambian nuestra forma de entender nuestro entorno (accidentes, fallecimiento, guerras…etc.) o mediante un proceso deliberado de cambio (terapia psicológica), la personalidad puede cambiar en algunos aspectos.
¿Qué son los trastornos de personalidad y que tipos de trastornos existen?
Los trastornos de personalidad son patrones permanentes de formas de sentir, pensar y actuar que se alejan considerablemente de las normas culturales y sociales. Estos patrones normalmente implican sufrimiento y repetición incontrolada de los mismos. Muchas veces la persona que padece estos trastornos no entiende por qué “no encaja” en su entorno, ya que percibe erróneamente su forma de sentir, pensar y actuar como adecuada. Los trastornos de personalidad se agrupan en tres tipos diferentes:- Trastornos del Grupo A: Trastorno paranoide de la personalidad, Trastorno esquizoide de la personalidad y Trastorno esquizotípico de la personalidad.
- Trastornos del Grupo B: Trastorno antisocial de la personalidad, Trastorno límite de la personalidad, Trastorno histriónico de la personalidad y Trastorno narcisista de la personalidad.
- Trastornos del Grupo C: Trastorno de la personalidad por evitación, Trastorno de la personalidad por dependencia y Trastorno obsesivo-compulsivo de la personalidad.
¿Qué tratamientos existen?
Estos trastornos no suelen ser los que llevan a la persona a acudir a terapia, sino por otros que con frecuencia los acompañan. Los trastornos de la conducta alimentaria, trastornos de la ansiedad o depresión son algunos de los que suelen estar comúnmente asociados con los trastornos de la personalidad y que surgen a causa de ellos. De los patrones comportamentales que se asocian a los trastornos de la personalidad, surgen interacciones complicadas que afectan de manera negativa en las relaciones interpersonales de estas personas. Como consecuencia de ello, se derivan otros trastornos que suelen ser el motivo por el cual estas personas acuden estas a terapia. Si bien es cierto que es muy difícil tratar los trastornos de la personalidad, las terapias conductuales han mostrado tener gran eficacia en los mismos. Muchos trastornos de la personalidad están asociados a factores genéticos relacionados con algún familiar que presentaba algún trastorno de la personalidad, pero existen muchos casos en los que pueden surgir derivados del consumo de sustancias o por la convergencia de factores ambientales. Los trastornos de la personalidad son muy comunes en nuestra sociedad, por lo que si crees que podemos ayudarte o crees conocer a alguien a quien podamos ayudar con su trastorno de la personalidad no dudes en ponerte en contacto con nosotros. En Cláritas podemos ayudarte.ESTAMOS CERCA DE TI
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