¿Cuántas veces se te han acumulado tareas por hacer y esto te ha generado frustración? ¿En cuántas ocasiones te has frustrado al ver que no te mueves para alcanzar metas que son importantes para ti? El motor que nos empuja y nos da fuerzas para alcanzar nuestros objetivos y cumplir con nuestras tareas rutinarias se llama motivación. La motivación es un aspecto del comportamiento humano con el que estamos acostumbrados a trabajar en psicoterapia.
¿Qué es la motivación? ¿Qué beneficios nos aporta? ¿Cómo podemos aumentar nuestra motivación? Estas son las preguntas a las que voy a dar respuesta en este artículo.
¿Qué es la motivación?
La motivación es un impulso interno que nos moviliza hacia conseguir o mantener objetivos y metas en nuestra vida. Este impulso se activa por el deseo que tenemos de alcanzar estos objetivos. Por esto, los objetivos que tiene cada persona en su vida juegan un papel fundamental en la motivación. Estos objetivos pueden ser de diferentes tipos:
- Laborales: ser valorado por el jefe, aumento del sueldo, disfrutar más el trabajo, etc.
- Relacionales: ser apreciado por mi pareja, pasar más tiempo con mis hijos, cuidar a mi madre, etc.
- Salud: estar más en forma, disminuir el riesgo de contraer enfermedades, etc.
- Personales: quererme más a mí mismo, tener más conocimiento o más cultura, estar más tranquilo, etc.
En psicología llamamos reforzadores a los “premios” o “castigos” que activan la motivación sobre cada comportamiento de una persona. Los premios son objetivos deseables que quiero conseguir, mientras que los castigos son situaciones desagradables que no quiero vivir (indiferencia de mi madre, aburrimiento, conflictos, etc.). Cada persona es diferente y tiene sus propios reforzadores/objetivos que van a motivar su comportamiento, por esto es muy importante conocerse bien a uno mismo para descubrir cuáles son nuestras motivaciones.
¿Por qué es bueno estar motivado? ¿Cómo nos afecta la desmotivación?
La motivación nos impulsa para alcanzar los objetivos que son importantes para nosotros y por tanto nos ayuda a alcanzar estados de felicidad y satisfacción. Tiene beneficios importantes para nuestra salud:
- Física: mayor activación y energía, menos dolor muscular, mejora los hábitos de sueño.
- Emocional: Ilusión, felicidad, confianza.
- Laboral: mejor rendimiento, mejor adaptación al equipo, satisfacción profesional.
- Relacional: aumenta y mejora la comunicación en la relación con familia, amigos, pareja.
En la otra cara de la moneda tenemos a la desmotivación. Cuando no se alcanzan objetivos vitales importantes y esta ausencia se mantiene en el tiempo la persona cae en estados emocionales de tristeza y pierde su energía. Es habitual que tras el tiempo también aparezca la desesperación y el pesimismo, apagándose ese motor que da fuerza (motivación). Estos síntomas son propios de la depresión. Esto no significa que si una persona está desmotivada necesariamente vaya a entrar en depresión. Lo que quiero decir es que si un estado de desmotivación se mantiene durante mucho tiempo es posible que la persona acabe en depresión.
¿Cómo podemos aumentar nuestra motivación?
A continuación voy a dar ciertas indicaciones que nos pueden ayudar a aumentar la motivación:
- Lo primero, es fundamental identificar cuáles son las metas que nos motivan en la vida. Como hemos dicho, la motivación es un motor que nos impulsa. Por lo tanto, lo primero es conocer qué objetivos son los que nos impulsan y ver si estos objetivos son realmente importantes para nosotros. De nada sirve impulsarnos si los objetivos están mal enfocados y la dirección no es la que queremos seguir. Es importante parar de vez en cuando y evaluar los objetivos que nos estamos fijando en la vida. Analizar si estos objetivos son alcanzables, valorar la balanza esfuerzo/beneficio y medir si puedo alcanzarlos a corto, medio o largo plazo, etc.
- Planificación y organización: planificar los movimientos que tengo que hacer para alcanzar estos objetivos y organizar las tareas en mi día a día ayuda a estar más motivados y obtener mejores resultados.
- Estilo de vida: Llevar una rutina de vida saludable en higiene de sueño, ejercicio, alimentación y actividades de disfrute ayuda a aumentar y mantener nuestra motivación.
- Identificar causas de desmotivación. Si no me es posible sacar motivación es porque algo me está pasando en la vida que hace que mi motor de energía no encienda. Puede ser cansancio, puede ser soledad, pueden ser pérdidas (trabajo, relaciones, etc.). Es importante darnos cuenta de qué nos pasa para así poder atender nuestras necesidades y recuperar la energía.
La psicoterapia es el espacio ideal para descubrir los problemas que están afectando a tu motivación. También para enfocar adecuadamente tus objetivos vitales y aumentar tu motivación en el día a día. Desde Cláritas podemos ayudarte a trabajar con la motivación, estamos especializados en el trabajo con población infanto-juvenil y adulta, en formato online y presencial.