La pereza es un concepto que ha sido estigmatizado y malinterpretado a lo largo de la historia.
A menudo, esta se asocia con la falta de voluntad o con un defecto de carácter. Sin embargo, habría que preguntarse si se trata de una elección consciente o hay factores más profundos y contextuales que la provocan.
¿Qué es el mito de la pereza?
El mito de la pereza radica en la creencia de que las personas que no cumplen con ciertas expectativas simplemente eligen ser inactivas o desmotivadas.
Esta visión simplista ignora las complejidades del cerebro humano y los factores psicológicos que pueden afectar nuestra capacidad para actuar.
En una sociedad que valora la productividad y el éxito, etiquetar a alguien de perezoso puede ser una forma de culpabilizar sin considerar circunstancias como la salud mental, el estrés o el miedo.
Sin embargo, es esencial comprender que la aparente pereza puede ser un síntoma de problemas más profundos que requieren atención y comprensión.
Posibles causas de la pereza
Comprender qué hay detrás de la pereza puede ayudarnos a abordarla de manera más efectiva y compasiva.
A veces, el miedo al fracaso es tan fuerte que preferimos no intentarlo en absoluto. De igual forma, el temor al éxito —y a las expectativas o responsabilidades que vienen con él— también puede ser paralizante.
De igual modo, el perfeccionismo puede cumplir la función de evitar comenzar una tarea si uno siente que no podrá hacerla perfectamente.
Por otro lado, la pereza también puede ser una señal de que algo no está bien físicamente o mentalmente. El cansancio crónico, la depresión y la ansiedad son factores que a menudo se disfrazan de pereza, de modo que, la falta de energía no es una simple cuestión de desmotivación, sino una condición que requiere atención.
Cuando no encontramos un propósito claro o un significado detrás de lo que hacemos, es común que la pereza se apodere de nosotros. Sin una razón que nos motive de manera interna, cualquier tarea puede parecer pesada y difícil de abordar. Encontrar un propósito personal suele ser clave para superar estos bloqueos.
En otras circunstancias, puede ser una respuesta natural a una sobrecarga de trabajo o a una rutina que nos ha dejado emocional y físicamente agotados. El burnout no sólo drena la energía, sino que también elimina la motivación, lo cual puede parecer pereza, pero en realidad es el cuerpo pidiendo una pausa.
La procrastinación y la pereza pueden surgir simplemente porque no sabemos por dónde empezar. Cuando las tareas parecen abrumadoras o no tenemos un plan de acción claro, la inercia se convierte en una opción fácil.
Así pues, identificar cuál de estas causas puede estar detrás de nuestros sentimientos de pereza nos da el poder de enfrentarlos con estrategias adecuadas.
y lo más importante, con empatía hacia nosotros mismos.
Cómo superar la pereza: estrategias para recuperar la motivación
Aunque el primer paso para superar la pereza suele ser el más difícil, también es el más decisivo para empezar a avanzar. Algunas propuestas que pueden ayudar a abordar esta problemática, son:
- Organiza y mantén un entorno ordenado: El desorden genera desmotivación. Para vencer la pereza, mantener un espacio organizado es esencial. Un entorno limpio y bien ordenado facilita la concentración y la energía positiva.
- Mejora tus hábitos de salud: Un estilo de vida saludable contribuye significativamente a reducir la pereza. Dormir bien, alimentarse de manera equilibrada y realizar ejercicio regularmente mejora tanto la energía física como la mental.
- Prioriza tus actividades: No todas las tareas son igual de urgentes. Para mantener la productividad y evitar el agobio, organiza tu lista según la prioridad de cada tarea.
- Haz listas de tareas realistas: Muchas veces, la pereza surge del caos de no tener claro qué tenemos que hacer. Antes de dormir, dedica unos minutos a escribir una lista de tareas pendientes para el día siguiente y sabrás exactamente en qué enfocarte.
- Divide tus metas en pequeños logros: A veces, plantearse metas muy ambiciosas puede ser intimidante y lleva a la procrastinación. Dividir un objetivo grande en pequeños hitos es mucho más manejable y motivador.
- Visualiza los beneficios de completar tus tareas: En lugar de centrarte en lo difícil que puede ser una tarea, enfócate en los beneficios que obtendrás al completarla. Para ello, visualiza tu éxito y cómo te sentirás una vez que logres tu objetivo.
- Elimina distracciones: Para ser productivo, es importante eliminar las distracciones. Mantén un horario específico para trabajar, descansar y disfrutar de tiempo libre.
- Empieza con la tarea más difícil: Las mañanas suelen ser el momento en el que tenemos más energía y fuerza de voluntad. Aprovecha este impulso inicial para afrontar la tarea más pesada o menos deseada. Luego, podrás enfocarte con mayor tranquilidad en las demás actividades.
- No hagas exceso de multitarea: Tratar de hacer muchas cosas al mismo tiempo sólo genera confusión y estrés. En su lugar, céntrate tan solo en una sola tarea a la vez hasta completarla antes de pasar a la siguiente.
- Contra el mito de la pereza: Es hora de ir contra el mito de la pereza y adoptar una perspectiva más empática y basada en el conocimiento científico.
Hay que reconocer el hecho de que factores como la depresión, la ansiedad y el miedo pueden influir en el comportamiento de una persona, siendo importante ofrecer apoyo en vez de enjuiciar a estas personas.
La próxima vez que percibas que alguien está siendo perezoso, piensa en si esta persona se encuentra enfrentando algún desafío emocional o mental; existen factores externos que puedan estar afectando su motivación y, además, busca alternativas para ofrecer ayuda o comprensión en lugar de críticas.
Al cambiar nuestra forma de pensar, no sólo ayudamos a aquellas personas que nos rodean, sino que también contribuimos a construir una sociedad más solidaria y comprensiva.
En Instituto Cláritas, estamos comprometidos a ayudarte a descubrir tu verdadero potencial y construir un futuro más brillante y lleno de posibilidades.
Nuestro objetivo es acompañarte en el proceso de desmontar el mito de la pereza y ayudarte a redescubrir tu motivación y pasión por la vida.
Fuentes
- https://www.psychologytoday.com/intl/articles/200707/the-lure-laziness
- https://www.cifiaglobal.com/issue/5/article/cgj-5-6.pdf
- https://www.econstor.eu/bitstream/10419/280326/1/1871050707.pdf
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